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Marta y David decidieron celebrar su boda en Masia Joan Sardà. En un lugar maravilloso al oeste de Vilafranca del Penedés. Un espacio rodeado de vinyes y una puesta de Sol que quita el hipo. Es un lugar desenfadado y natural, como Marta y David, que son muy muy muy d’estar per casa que decimos nosotros.

Marta es atrevida, echá palante y divertida. David es algo más serio, o eso es lo que quiere aparentar, pero es un tipo genial, simpático y amable. Nos abrieron las puertas de su casa para compartir unas cervecitas el día que nos conocimos, y todo fue sobre ruedas: conectamos desde el principio: risas y confidencias, y esa complicidad el día de la boda se notó muy mucho. Cómo fotógrafos de boda es de vital importancia que las parejas se abran, que confíen en nosotros, para poder meternos en medio de la acción y transmitir todo lo que se vive en ese día.

Decidieron empezar su día directamente en la masía, que es algo que siempre recomendamos encarecidamente: por tranquilidad, por logística, por tiempo, por poder disfrutar de verdad de tu gran día desde el minuto 0.

Marta vistió un maravilloso vestido de encaje, dos piezas, con una falda de Tul guapísima: muy del estilo al que llevaba Gala en su elopement en Londres. Un imprescindible para Marta era la comodidad, y lo logró (de hecho últimamente está muy muy de moda el rollito dos piezas: sólo tenéis que ver a Anna y a Carlota). David optó por un traje de corte inglés en gris que le quedaba como un guante 😉

Decidieron encontrarse antes de la ceremonia, para tener un ratito a solas, para verse por primera vez en la intimidad: lo que los modernos llamamos (voy de moderno por la vida) un First Look ¡que puta manía de hablar en Inglés que hemos cogido oye!

La ceremonia siguió bajo las palmeras, rodeados de plantas, arropados por familiares, y dirigida por el trío La La La – las mejores amigas de Marta- que dijeron unas palabras maravillosas que nos hicieron llorar a todxs.

Sólo nos escapamos un ratito con la pareja para ver caer el Sol desde la zona de las viñas, y aprovechamos para hacer algunas fotitos, las “no típicas” fotos de boda, jeje Siempre lo decimos: nos encantan los besos y los abrazos.

Cuando decides celebrar tu boda en Masia Joan Sardà sabes que el punto fuerte sin ninguna duda. Suelen arrancar con un súper cóctel al aire libre, en la zona del lago; y continúan con una cena en formato Market / Show Cooking (otra vez con el puto Inglés): mogollón de paraditas de comida, como si de un mercado se tratase; donde los invitados pueden elegir que probar y que no, aunque está todo buenísimo, damos fe. Agunas cositas se cocinan en directo: arrocitos; chuletones madurados… y tienen un parmesano de casi 40 Kg.

Cal Blay es el catering que se encarga de la comida, cocinan de muerte, y es una de las razones por las que Masia Joan Sardà está en el nº5 de nuestro rankin de los mejores sitios para casarse en Catalunya.

La noche siguió con un millón de sorpresas para los más allegados, y para futuras parejas que esperamos encontrarnos en el camino, jejje, ya sabéis: De una boda sale otra boda. 

La fiesta fué genial, con pequeños y mayores sin parar de bailar: brutal.

En fin parejita, que mil millones de gracias por confiar en nosotros para ser vuestros videógrafos y fotógrafos de boda. Esperamos veros prontito. ¿Y a vosotrxs? ¿Te gustaría celebrar tu boda en Masia Joan Sardà?

¿Con ganas de más? Aquí te dejamos el video de su boda

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